Sobre el rey, la reina, y demás secuaces.

Ante la tragedia que azotó a Valencia recientemente, el rey y la reina -además de los diferentes órganos y entidades estatales- han dejado bien claro que están más que dispuestos a aceptar el sacrificio de sus vasallos y ciudadanos.

Ante esta panorámica y realidad latente y patente, sólo queda esperar a que los vasallos y ciudadanos españoles estén a la altura y actúen en consecuencia, aceptando la dimisión del rey, la reina, y demás secuaces.

Que, como decimos por acá, 'amor con amor se paga'.

1806.
Nam stat fua cuiq~ dies, breue et irreparabile tempus.

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