Y el ahorro...?

Quod scripsi, scripsi!

Son las seis de la tarde y tengo que prender todos los malditos focos de la casa, porque con el méndigo cambio de horario con el que se supone que todos vamos a ahorrar un montonal la maldita sombra llega una hora antes de lo que debe.

Qué soberana estupidez: necesito más luz natural en la tarde, nó en la mañana.

En la tarde está TODA LA FAMILIA en casa, por ende están prendidas todas las teles, todos los focos, se usa hasta el tope la lavadora, el refri, el horno de microondas.

A las siete de la mañana y nomás un rato en que los güercos van de salida a la escuela, o uno anda soñoliento y lo que quiere es llegar al trabajo nomás a desperezarse, no hay tanto gasto de luz eléctrica.

Por mi parte que esos imbéciles que autorizaron el cambio de horario se metan su ahorro por donde les quepa, maldita bola de idiotas.